El invierno es una realidad, las bajas temperaturas se hacen sentir en la cordillera y las cascadas de hielo están en perfectas condiciones para recibir la visita de los escaladores amantes de piolets y crampones. Saber cómo y cuándo colocar los tornillos es fundamental para hacer que la escalada en hielo sea segura; la solidez de los seguros y reuniones depende en parte de la calidad del hielo y de una correcta y eficiente colocación de los tornillos. Conscientes de que cada vez son más los escaladores motivados por esta disciplina, es que hemos escrito este artículo con consejos para quienes se inician en el hielo.

Proceso para colocar un tornillo de hielo

• Antes de colocar un tornillo es importante limpiar la zona en donde lo emplazaremos, para eso es necesario quitar con el piolet (pica o pala) el hielo o la nieve superficial y reciente que se pueda encontrar sobre el hielo sólido y seguro.
• Una vez que hayas limpiado el lugar donde emplazarás el seguro, debes fijar tu cuerpo con los pies a la misma altura y uno de los brazos, preferiblemente el menos diestro, enclavarlo lo más alto que se pueda (fig 1).

• Luego se debe tomar el tornillo por su cabeza y colocarlo a la altura de nuestras caderas para poder ejercer el máximo de palanca y de presión. Es importante darle una rotación previa con la palma de la mano, para que al realizar el primer giro, el tornillo "muerda el hielo" y quede ligeramente emplazado (fig 2).

• Se continuará dando un par de giros al tornillo, hasta que se encuentre en una posición más firme. Dependiendo del modelo, se podrá hacer uso de la manivela con que cuentan la mayoría de los tornillos modernos y así poder enroscarlos de manera más rápida y eficiente. En caso de no contar con esta leva, se debe hacer el giro de la misma manera que se realizó al inicio, hasta que la oreja o cabeza del tornillo toque la superficie del hielo (fig 3).

• Una vez completada la introducción del tornillo, se colocará una cinta express y se pasará la cuerda en ella. Después se recomienda cambiar la posición de las manos, para descansar un poco el brazo de apoyo, y luego continuar con nuestra escalada (fig 4).

Recomendaciones al momento de colocar los tornillos

• Si el hielo se agrieta mucho mientras el tornillo es introducido es recomendable retirarlo, limpiar nuevamente la zona e introducirlo nuevamente; o derechamente buscar un lugar en donde el hielo se encuentre en mejores condiciones.
• Opta por colocar los tornillos en las zonas cóncavas antes que en las convexas. Las zonas cóncavas tienden a ser más sólidas y a agrietarse menos al introducir el tornillo.
• Al extraer los tornillos se debe eliminar el hielo que se encontrará dentro del mismo para evitar que se congele en su interior y lo deje inutilizable durante la escalada. Sacúdelo bien. Existen dispositivos como el Candela de Grivel para hacer puentes de hielo (Abalakov) que pueden ser insertados en el tubo del tornillo y así retirar el hielo de su interior (es importante que sea plástico para no rayar internamente el tornillo, ya que esto aumentará la adhesión del hielo en su interior). Para sacar el hielo del tornillo nunca lo golpees contra superficies duras.
• Es importante colocar el tornillo a 90° con respecto a la superficie del hielo. Existen distintos estudios y manuales que recomiendan colocar el tornillo con un ángulo de hasta unos 10° a favor de la posible tracción en hielo de buenas condiciones, e incluso con una inclinación de unos 10° en contra de la posible tracción en hielo de dudosa solidez. Para no prestarnos a confusiones se recomienda a quienes se inician en este tipo de escalada que coloquen los tornillos perpendicularmente a la superficie del hielo.

¿Cómo identificar el hielo en buenas condiciones?

Hemos señalado que existe hielo de "buena calidad" y hielo de "mala calidad", pero ¿Cómo se puede identificar cuando estamos bajo buenas condiciones? La experiencia del escalador le permitirá distinguir la calidad del hielo rápidamente, pero para un principiante determinar la condición puede ser un poco más complejo, por lo que es bueno conocer algunos factores objetivos que sirven de referencia a quienes se inician en la escalada en hielo.

• Temperatura: las mejores condiciones del hielo suelen darse a una temperatura que va desde los -5°C hasta los +5°C. La isoterma es una buena manera de prever las condiciones que encontrarás en el sector de escalada. Una isoterma alta puede propiciar un hielo inestable y también mayor caída de material hacia el pie de vía.
• Aspecto: el hielo claro y azulado (vidrioso) por lo general contiene menos aire lo que lo hace tener mayor densidad y mejor capacidad de soportar la carga sobre un tornillo. El hielo grisáceo y opaco suele tener mayor cantidad de burbujas de aire y por lo tanto es menos denso y menos resistente.
• Sonido y sensación tras clavar un piolet: tras el golpe de un piolet, el hielo de baja densidad no genera una deformación superficial a diferencia del hielo denso que tras un buen golpe revela una fosa cónica y una distorsión superficial en el lugar donde entra la pica. Con la práctica verás que al clavar tu piolet en el hielo lo identificarás de inmediato.
• Consistencia del hielo durante la introducción del tornillo: si al colocar el tornillo el hielo no ofrece mayor resistencia y sientes que va quebrando fácilmente las capas menos densas quiere decir que el hielo no es sólido. Cuando colocas un tornillo en hielo de buena calidad es necesario ejercer cierta fuerza y el testimonio (hielo que se extrae y sale por el orificio del tornillo) es consistente y continuo.

Testimonio que denota una buena calidad del hielo.

Estos son solo algunos parámetros que te pueden ayudar a buscar un lugar seguro donde proteger tu escalada. Recuerda que muchas veces en una misma cascada puede haber sectores que ofrecen mayor seguridad que otros. Es posible que el lugar donde pensabas proteger inicialmente no sea el más seguro, pero quizás un par de metros hacia algún costado encuentres hielo a prueba de bombas. Como señalamos antes, la experiencia te hará identificar los mejores lugares donde proteger.

Consejos finales

• La escalada en hielo de primero es bastante más compleja que en la modalidad Top Rope, por lo que es recomendable que antes de comenzar a liderar largos de hielo escales mucho con la cuerda pasada por arriba colocando tornillos, eso te permitirá aprender y mejorar la técnica hasta que te sientas cómodo en dicha superficie sin exponerte a una caída de primero de cuerda.
• Los tonillos bien colocados en hielo de buena calidad aguantan con creces una caída de primero de cuerda, pero a pesar de aquello, la consigna en este tipo de escalada es "No Caer", ya que por lo general las caídas son largas y expuestas a golpes con los piolets o con los crampones.
• Aprende a colocar los tornillos de hielo desde el suelo. Practica mucho con ambas manos, muchas veces el hielo sólido no estará al alcance de la mano más hábil.
• Mientras escales no esperes estar en apuros para proteger. Eso sí, recuerda que para que sea seguro, el hielo debe ser sólido. No tengas miedo de retroceder, los anclajes de hielo no son tan fiables como los de roca, a la vez que las caídas pueden tener consecuencias más serias, por lo si te sientes inseguro no dudes en retroceder o bajar.
• Recuerda mantener los tornillos con suficiente filo para que puedan ser introducidos de manera eficiente y segura.
• Mientras los trasladas en tu mochila, protege los tornillos con cualquier funda o envoltorio para mantener en buen estado el filo de la punta y proteger el hilo.